EL ARTE DE GRACE

EL ARTE DE GRACE
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domingo, 24 de marzo de 2019

Lo que pasa cuando se trasnocha mirando "Sin Aliento" (À bout de souffle) de Godard.


Necesito un cuarto. Un cuarto de hotel, o de pensión.
Viejo, antiguo, con historia en sus muros.
Y un ventanal. No muy grande.
Solo un ventanal como para asomarse.
A la calle, una calle empedrada. A la vida, a un día tan solo.
Soleado, lluvioso, nublado, primaveral u otoñal.
No importa. Solo un día en una cascada interminable de siglos.
Un disco. De los viejos. Los que suenan en un tocadiscos.
La voz de Juliette Greco.
Y todo el aroma de los cafés en un lejano París.
Solo eso. Solo un lugar en el espacio y en un tiempo que solo persiste en la memoria.
No sé de donde. Pero está en mi memoria.
Tal vez de libros, tal vez de filmes, tal vez de solo imaginar.
Pero quiero y persisto e insisto que necesito
solo un cuarto, el humo de un cigarrillo anacrónico
y caminando ahí abajo por una vereda gastada
y sentada en un banco de la plaza leyendo un libro
y solo parada en un muelle mirando el punto de fuga
hacia el mar
y sentada en cuclillas sobre la cama de mi cuarto
leyéndome poesías
o el resumen de un estreno cinematográfico
que iremos a ver
hoy al anochecer....